A medida que se acerca la visita anual al veterinario de su gatito y las vacunas, es posible que se pregunte si las vacunas que está recibiendo su gato son necesarias. Si bien desea evitar vacunar excesivamente a su gato, existen vacunas que se consideran esenciales para el plan de salud de su gato, llamadas vacunas básicas.
Vacunas básicas
El lugar más seguro para su gato es el interior de su casa, donde el tiempo que pasa al aire libre está cuidadosamente controlado y supervisado. Sin embargo, incluso estos gatos necesitarán protección contra las enfermedades comunes que pueden contraerse o encontrarse. Las vacunas que se consideran esenciales se denominan vacunas básicas y son:
FVRCP
Esta vacuna combinada aborda las infecciones virales más comunes a las que son propensos los gatos. Estos son la rinotraqueítis viral felina (FVR), el calicivirus felino (C) y la panleucopenia felina (P).
Todos estos son altamente contagiosos y potencialmente fatales, por lo que es importante que su gato desarrolle inmunidad contra ellos desde joven y la mantenga durante toda su vida. Es probable que su gato reciba varias vacunas de refuerzo cuando sea un gatito joven, seguidas de una dosis de refuerzo cada 3 años.
Rabia felina
En los EE. UU., muchos estados tienen leyes que exigen que los perros y gatos sigan un calendario regular de vacunas contra la rabia. La rabia es una enfermedad mortal que puede provocar parálisis, convulsiones, dificultad para respirar, salivación anormal y comportamientos extraños en sus gatos.
Una vez contraído, no existe cura para los gatos con rabia. Los humanos también pueden sufrir rabia y requerir un viaje rápido al hospital para recibir una serie de vacunas para prevenir la progresión de la enfermedad. Las vacunas contra la rabia para gatos se ofrecen en dosis anuales o en dosis de 3 años.
Otra opción
La leucemia felina es una infección viral que ataca los glóbulos blancos de su gato, dejando su sistema inmunológico incapaz de combatir los gérmenes y las enfermedades cotidianas. Puede transmitirse de un gato a otro a través de la saliva, por lo que los gatos FeLV+ suelen vivir en hogares solos o con otros gatos positivos.
Su veterinario puede sugerirle una vacuna para ayudar a prevenir esta enfermedad. Dado que se transmite a través del contacto con una ca positiva, algunos dueños de mascotas optan por no recibir esta vacuna ya que su gatito no sale ni se encuentra con otros gatos.
Sin embargo, si utilizas un arnés o un catio para tu gato, siempre existe la posibilidad de que quede expuesto. Las personas que viven en áreas con una gran población de gatos salvajes deben estar especialmente atentas al virus, ya que los gatos del vecindario pueden husmear en los espacios al aire libre de su gato por la noche.
Conclusión
En resumen, las vacunas son herramientas importantes que pueden ayudar a mantener sanos a nuestros gatos. Sin embargo, es importante ser consciente de los riesgos que implica la vacunación. y para asegurarnos de que tenemos toda la información que necesitamos antes de tomar una decisión.
Otra forma en que podemos ayudar a mantener seguros a nuestros gatos durante sus vacunas habituales es minimizar los efectos secundarios. Puedes obtener más información sobre cómo hacerlo en nuestro blog sobre lasvacunas más seguras para tu gato.
¡Sigue dándoles a tus mascotas lo mejor de la vida natural!